Wabi top aguamarina

¿Os acordáis del Top Nordés que os enseñé hace unos días? Entre otras cosas os contaba que para hacerlo tiré de fondo de alijo lanero, jeje, revisé qué ovillos tenía en casa y en lugar de comprar ovillos nuevos tiré de reservas.

Pues revisando mis reservas laneras para el Top Nordés escogí también unos ovillitos azules que llevaban años guardados para hacer este Wabi Top, diseño que resulta que también es de Lola Dacosta.

Esta vez la idea era tejer para mí, aunque ya os adelanto que la cosa se fue torciendo por el camino y este Wabi Top tiene otro hogar que no es el mío. Os cuento.

Venía de tejer Top Nordés naranja para mi amiga y había comprobado que la talla S me quedaba planchada así que cuando me disponía a montar los puntos para el Wabi Top lo primero que hice fue revisar la tabla de medidas para verificar que en este diseño la S también era y mi talla. Como cabía esperar, de acuerdo con las medidas indicadas en el patrón, esa era mi talla. Pues nada, es sencillo, si la muestra de tensión cuadra y la tabla de medidas dice que la S es mi talla, pues esa es mi talla y esa es precisamente la talla que escogí para seguir las instrucciones.

Este top tiene una construcción un tanto peculiar. Va empezado por arriba, se hace un cordoncillo redondo y a partir de ahí se empieza a tejer. Tiene una sección de vueltas cortas para dar forma a la prenda y que siente de maravilla. Pues bien, yo hice el cordoncillo y empecé con la sección de vueltas cortas, peeeeero.... y aquí empiezan mis peros, a mí me daba la sensación de que aquello era pequeño. Ya cuando hice el cordoncillo, antes de empezar con el cuerpo propiamente dicho se me metió entre cuerno y cuerno que era pequeño.

Y entonces comenzó mi diálogo interior conmigo misma:

- A ver, céntrate, si la muestra te da y la tabla de medidas dice que esa es la talla, tiene que ser.
- Ya, pero este cordoncillo es un poco pequeño, no me va a dar para que me quepa la cabeza y caiga en los hombros.
- Que sí, que te tiene que dar.
- Pues no lo veo claro, porque entre que tiene que ir entrelazado con el del otro lado y demás, no me va a caber.

A todo esto, yo seguía avanzando con las vueltas cortas.

- No lo veo, voy a deshacer y cojo la talla siguiente.
- Pero mira que la talla siguiente te va a quedar grande, que ya es un top amplio, te vas a ver como un saco.
- Bueno, pues no cambio de talla, deshago y pruebo a hacer el cordoncillo con un número más de aguja para que me de bien para pasar la cabeza y sigo luego con la de 3 mm.

Y eso hice, tiré del hilo, me cogí una aguja más gordita, pero sólo medio número, y me dispuse a hacer nuevamente el cordoncillo.

- Ups, ahora parece que el cordoncillo es enoooorme, aunque me cambie a la aguja pequeña para tejer el cuerpo va a colgar mucho.
- Ya te decía yo que ibas bien y no tenías que deshacer.
- Que sí, tenía que deshacer porque iba a quedarme pequeño.
- Pues ya ves que ahora ese cordoncillo es una barbaridad.
- Está claro que este híbrido con dos números de aguja no funciona, será mejor deshacer y pasarme directamente a la talla M.

Y eso hice, tiré del hilo nuevamente y empecé otra vez el cordoncillo, pero esta vez siguiendo las explicaciones de la talla M.

Iba yo avanzando en mi top, terminé la sección de vueltas cortas y llevaba la sisa mediada cuando me asaltaron nuevamente las dudas.

- No puede ser, esto se ve un pelín ancho.
- Es que tu talla es la S, no la M.
- Me va a quedar muy ancho.
- Efectivamente.
- A lo mejor sólo es efecto óptico por ver una parte sola, una vez que una el otro lado y empiece a tejer en redondo hacia abajo seguro que se ve mejor.

Con lo fácil que hubiera sido medir en ese momento, pero no, no hay mayor ciego que el que no quiere ver y tiré hacia adelante.

Hice la sisa entera, monté el otro cordoncillo, hice la otra parte hasta el punto de unir en circular y puse el piloto automático. Pero claro, la semillita de la duda ya se había instalado en mi mente desde el principio.

- Está claro que me va a quedar ancho.
- Es que tu talla es la S, no la M.
- Pues no voy a deshacer, me da igual, lo termino y si realmente me queda grande malo será que no encuentre a quien regalárselo.

Y eso hice, seguí. Y cuando estaba llegando al calado me di cuenta de que se me estaba acabando el hilo. ¿Pero cómo era posible si había calculado que me llegaba antes de empezar?

- Esto no me puede estar pasando, el hilo lo comprobé precisamente porque son ovillos viejos y no hay más opción que hacerlo con los que tengo.
- Es que tu talla es la S, no la M.
- A ver, respira y piensa opciones. Es un hilo bastante común, no se trata de una edición especial ni nada raro, se sigue fabricando así que seguro que encuentras otro ovillo, sólo hay que comprobar que aun existe ese color. Dar con la tintada va a ser imposible, claro, porque la carambola del chal Alloy sólo se da una vez en la vida. Pero bueno, que da un poco igual que sea otra tintada, hago coincidir el nuevo ovillo con el calado y listo, aunque sea un poco diferente no va a quedar mal.
- ¿Y si no encuentras ovillo?
- No quiero ni pensarlo porque deshacer no voy a deshacer, si deshago no lo vuelvo a tejer, si no encuentro ese color ya buscaré otro que le vaya bien y hago la sección calada en otro color.

Una búsqueda rápida en dos o tres tiendas que trabajan con DMC y listo, apareció el ovillo. El color aguamarina se sigue fabricando, la tintada no era la misma, claro, pero como si lo fuera porque de verdad que ni poniendo el ovillo encima del top ni una vez tejido noto la diferencia.

Después de todas estas peripecias terminé de tejer el top, le apliqué un bloqueo suave (no hacía falta estirar más de la cuenta) y una vez seco me lo probé.

- Pues me queda grande.
- Es que tu talla es la S, no la M.

Tocaba buscar a quién regalar el top y la búsqueda fue rapidita.

- Yo: Mami, te traigo una cosa para que te pruebes a ver si te gusta y te queda bien.
- Mi madre: Me encanta.
- Yo: Pues si lo quieres, tuyo es.
- Mi madre: ¿Seguro?
- Yo: Por supuesto, a mí me queda grande y no voy a deshacer, si no lo quieres tú sigo buscando hasta que encuentre quien lo quiera.
- Mi madre: No, no, no, me lo quedo yo. Pero mira si te sobró algo de hilo para darle unas puntaditas o algo en el escote que me queda un poco ancho.

Efectivamente, el escote le iba ancho, así que le hice un pequeño apaño con unos cordoncillos para cerrarlo un poco y listo. Quedó encantada con su top nuevo.

La verdad es que este diseño es una preciosidad. Los hombros con los cordoncillos entrelazados quedan espectaculares.

El calado del bajo rompe la monotonía del punto liso del cuerpo y le da ese toque especial sin recargar.

El patrón es de pago y lo podéis comprar en Ravelry. Os dejo el enlace.

Patrón "Wabi Top" (Lola Dacosta) en Ravelry

Yo lo he tejido con DMC Natura Just Cotton en color aguamarina y con agujas de 3 mm tal como indica el patrón.

Sin más, os dejo con el reportaje fotográfico, esta vez sin rellenito:

Si buscáis inspiración para tejer podéis ver más versiones de este top en Ravelry, consultando los proyectos enlazados con el patrón, y en Instagram, buscando el hashtag #wabitop o el hashtag #topwabi.

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