He tenido la suerte de colaborar de nuevo con "Sweetbriar Sisters" probando uno de sus patrones. El primero que probé fue "Bewitching Bats", ¿os acordáis? El resultado de esa prueba fue el murciélago Pinkie.
Esta vez el patrón a probar era de un PAVO. Os presento a "Tully the Turkey".
¿Por qué un pavo? Pues para celebrar Acción de Gracias. Os confieso que cuando me llegó el correo con la invitación para probar el patrón tuve que ir a consultar en qué fecha caía. No es una tradición española, conozco esa fiesta porque aparece en un montón de series de televisión y películas americanas, pero no sabía bien ni la fecha ni el origen exacto de la celebración. Así que me fui a la wikipedia para conocer un poco más sobre esa fiesta y su relación con los pavos.
El Día de Acción de Gracias (en inglés Thanksgiving Day) es una celebración tradicional de Estados Unidos que se celebra el cuarto jueves del mes de noviembre, es decir, fue ayer (me despisté por completo, os lo confieso, pretendía publicar el pavito antes de Acción de Gracias, pero esta semana no ha podido ser). En esta fecha, las familias se reúnen para cenar y se prepara un banquete en el que el plato principal tradicional para la cena es un gran pavo asado u horneado. El motivo de esta celebración es el de dar gracias por todo lo recibido a lo largo del último año (salud, trabajo, bienestar, amor…), de ahí su nombre. Normalmente el agradecimiento es hacia la figura de Dios (aunque cada vez hay más personas que no profesan religión alguna y que siguen celebrando esa jornada tan especial).
Ahora ya sé un poquito más sobre las costumbres en otros países y ha sido muy fácil, ¿verdad?. Hoy en día tenemos un montón de información al alcance de la mano, basta con acceder a internet y buscar un poquito. El señor "Google" está ahí incansable para atendernos a cualquier hora. ¿Os acordáis de cómo era este proceso antes de internet? En lugar de Google estaba la "gran enciclopedoa Lorousse ilustrada". Qué tiempos aquellos cuando para hacer un trabajo del cole tenías que ir a la biblioteca y rebuscar en los libros, tomar notas, hacer resúmenes y esquemas, y luego juntar todo eso y redactar tu trabajo. En casa de mi madre todavía hay un par de enciclopedias en el salón junto con una colección de clásicos de la literatura universal. ¡Cuántos recuerdos! Bueno, no nos pongamos nostálgicos, que seguro que hay alguien por ahí leyendo esto que opina que todo esto debió suceder allá por el pleistoceno y no va muy desencaminado, jajajaa.
Yo venía a enseñaros mi pavo Tully. El patrón es de "Sweetbriar Sisters" y realmente es un muñeco muy sencillo de coser, no hace falta ser ninguna experta costurera para hacerlo. Hay que ir despacito en las partes curvas para que queden decentes (con lo que me cuesta a mí eso de coser despacio). No es difícil, sólo hay que ponerle un poco de cariño para que queden bien. Como podéis ver en la foto yo no le puse suficiente cariño, las costuras curvas y yo aun no nos llevamos demasiado bien.
Cuando vi el patrón por primera vez pensé que con las patas iba a tener trabajo para una semana como mínimo. Cada pata está formada por 3 piezas que a priori no tenía muy claro que se pudieran coser como explicaba el patrón. Pero sí, se pueden coser y además quedan monísimas. Se rellenan únicamente los pies de forma que las patitas quedan colgando para dar un punto simpático al pavito. Yo rellené demasiado los pies y una vez cosidas las patas el relleno se desplazó un poco hacia arriba.
Tully iba a ser morado con la cola roja y azul. La combinación final de colores es obra de mi niña. Me vio un día jugando con las telas y probando combinaciones y vino solícita a dar su opinión experta:
- ¿Qué vas a hacer?, mami
- Un muñeco, mira (le enseñé la foto), es un pavo. ¿Te gusta?
- Sí. ¿De qué color va a ser?
- Violeta, ¿ves?, con las patas naranjas... (en este punto me cortó)
- No, es más bonito azul.
- ¿Te gusta azul?
- Sí
Y así fue, pavo azul por decisión de mi asesora experta. No volvimos a hablar del pavo hasta el día de su presentación. Cuando se lo enseñé terminado se le iluminó la cara (creo que le gustó más que el murciélago Pinkie):
- ¿Te gusta cómo quedó?
- Síiii. ¿Para quién es?
- Para nadie, lo hice para probar un patrón que me mandó una chica.
- Pues entonces es mío.
Y me lo quitó de las manos, anduvo trasteando con él por casa y ahora está en su cama haciendo compañía a "los elegidos" (no caben todos los muñecos en la cama). De vez en cuando juega con otros muñecos y otras veces aprovecha para hacer un poco de gimnasia. fijaos qué bien estira, sentado con las patitas abiertas se toca las puntas de los pies. Es todo un campeón.
¿Qué os parece mi versión de "Tully the Turkey"?
Por si alguien está interesado en hacer un pavito así de chulo os diré que el patrón es de pago y lo podéis encontrar en la web de "Sweetbriar Sisters".
Esta vez el patrón a probar era de un PAVO. Os presento a "Tully the Turkey".
¿Por qué un pavo? Pues para celebrar Acción de Gracias. Os confieso que cuando me llegó el correo con la invitación para probar el patrón tuve que ir a consultar en qué fecha caía. No es una tradición española, conozco esa fiesta porque aparece en un montón de series de televisión y películas americanas, pero no sabía bien ni la fecha ni el origen exacto de la celebración. Así que me fui a la wikipedia para conocer un poco más sobre esa fiesta y su relación con los pavos.
El Día de Acción de Gracias (en inglés Thanksgiving Day) es una celebración tradicional de Estados Unidos que se celebra el cuarto jueves del mes de noviembre, es decir, fue ayer (me despisté por completo, os lo confieso, pretendía publicar el pavito antes de Acción de Gracias, pero esta semana no ha podido ser). En esta fecha, las familias se reúnen para cenar y se prepara un banquete en el que el plato principal tradicional para la cena es un gran pavo asado u horneado. El motivo de esta celebración es el de dar gracias por todo lo recibido a lo largo del último año (salud, trabajo, bienestar, amor…), de ahí su nombre. Normalmente el agradecimiento es hacia la figura de Dios (aunque cada vez hay más personas que no profesan religión alguna y que siguen celebrando esa jornada tan especial).
Ahora ya sé un poquito más sobre las costumbres en otros países y ha sido muy fácil, ¿verdad?. Hoy en día tenemos un montón de información al alcance de la mano, basta con acceder a internet y buscar un poquito. El señor "Google" está ahí incansable para atendernos a cualquier hora. ¿Os acordáis de cómo era este proceso antes de internet? En lugar de Google estaba la "gran enciclopedoa Lorousse ilustrada". Qué tiempos aquellos cuando para hacer un trabajo del cole tenías que ir a la biblioteca y rebuscar en los libros, tomar notas, hacer resúmenes y esquemas, y luego juntar todo eso y redactar tu trabajo. En casa de mi madre todavía hay un par de enciclopedias en el salón junto con una colección de clásicos de la literatura universal. ¡Cuántos recuerdos! Bueno, no nos pongamos nostálgicos, que seguro que hay alguien por ahí leyendo esto que opina que todo esto debió suceder allá por el pleistoceno y no va muy desencaminado, jajajaa.
Yo venía a enseñaros mi pavo Tully. El patrón es de "Sweetbriar Sisters" y realmente es un muñeco muy sencillo de coser, no hace falta ser ninguna experta costurera para hacerlo. Hay que ir despacito en las partes curvas para que queden decentes (con lo que me cuesta a mí eso de coser despacio). No es difícil, sólo hay que ponerle un poco de cariño para que queden bien. Como podéis ver en la foto yo no le puse suficiente cariño, las costuras curvas y yo aun no nos llevamos demasiado bien.
Cuando vi el patrón por primera vez pensé que con las patas iba a tener trabajo para una semana como mínimo. Cada pata está formada por 3 piezas que a priori no tenía muy claro que se pudieran coser como explicaba el patrón. Pero sí, se pueden coser y además quedan monísimas. Se rellenan únicamente los pies de forma que las patitas quedan colgando para dar un punto simpático al pavito. Yo rellené demasiado los pies y una vez cosidas las patas el relleno se desplazó un poco hacia arriba.
Tully iba a ser morado con la cola roja y azul. La combinación final de colores es obra de mi niña. Me vio un día jugando con las telas y probando combinaciones y vino solícita a dar su opinión experta:
- ¿Qué vas a hacer?, mami
- Un muñeco, mira (le enseñé la foto), es un pavo. ¿Te gusta?
- Sí. ¿De qué color va a ser?
- Violeta, ¿ves?, con las patas naranjas... (en este punto me cortó)
- No, es más bonito azul.
- ¿Te gusta azul?
- Sí
Y así fue, pavo azul por decisión de mi asesora experta. No volvimos a hablar del pavo hasta el día de su presentación. Cuando se lo enseñé terminado se le iluminó la cara (creo que le gustó más que el murciélago Pinkie):
- ¿Te gusta cómo quedó?
- Síiii. ¿Para quién es?
- Para nadie, lo hice para probar un patrón que me mandó una chica.
- Pues entonces es mío.
Y me lo quitó de las manos, anduvo trasteando con él por casa y ahora está en su cama haciendo compañía a "los elegidos" (no caben todos los muñecos en la cama). De vez en cuando juega con otros muñecos y otras veces aprovecha para hacer un poco de gimnasia. fijaos qué bien estira, sentado con las patitas abiertas se toca las puntas de los pies. Es todo un campeón.
¿Qué os parece mi versión de "Tully the Turkey"?
Por si alguien está interesado en hacer un pavito así de chulo os diré que el patrón es de pago y lo podéis encontrar en la web de "Sweetbriar Sisters".
Fiestas de enlaces: Fiesta de Enlaces #157 de Arte Friki
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